¿Que te parece si avisas antes de aparecer? {Damon}

"Tarde, siempre tarde" Por alguna razon esta mañana no habia logrado levantarme a tiempo y hasta que termine de prepararme ya habian pasado unos cuantos minutos asique habia logrado hacerme una rapida coleta alta y elegir la primera ropa, pero con conciencia, que encontre en el armario y salir lo mas rapido posible de casa. Casi ni presete atencion a mi estomago que rugia quejandose, ya buscaria el momento de comer algo.
Caminaba rapido por el ayuntamiento, casi llegando al edificio del Instituto, mientras mi cabeza seguia dandole vueltas al mismo asunto. Damon. Desde aquella extraña visita a mi habitacion mi mente casi no habia dejado de pensar en eso. Era frecuente pensar en Damon, y no solo por ser el hermano de Stefan sino porque siempre encontraba la forma de aparecer en mis pensamientos inconscientemente. Sin embargo, esta vez aquellos pensamientos eran algo distintos y a la vez mas complicados. ¿por que se me aparecia casi todas las noches en mis sueños? pesadillas claro, pero pesadillas de las que no despertaba espantada, y eso lograba incomodarme.
Noté desde donde estaba que todavia algunos pocos alumnos, que no reconocí, estaban entrando pro las puertas asique tomé aire y relajé un poco mas el paso.

Un auto en la carretera andando a toda velocidad, el mío obviamente, era el único que valía la pena mencionar en el lugar. El Rolls-Royce negro era toda una invitación al delito, y dejarme llevar por aquella invitación era justo lo que iba a hacer.
Aparqué en el instituto. No había muchas personas por ahí afuera, esperaba que Elena no estuviera ya en clases o tendría que usar mi persuasión con su profesor.

Me metí al edificio y deambulé por los pasillos hasta encontrarla. Estaba de espaldas a mi caminando a paso desganado hasta la que sería su próxima clase.
Fui sigilosamente hasta ella y sin debatir demasiado tapé su boca por detrás y susurré en su oído con una perfecta voz grave, estremecedora - Estás cordialmente invitada a ser secuestrada, honey. No se acepta un "no" como respuesta - quité mi mano de su boca para dejarla hablar, deslizándola suavemente dando como resultado una caricia que rápidamente se desvaneció.

Entre al instituto y me diriji sin ganas hacia el salón de la clase de historia, pero justo antes de llegar y sin previo aviso "alguien" tapó mi boca. Mi primer impulso fue seccionar de forma inquieta, pero deje de moverme cuando escuché la voz de Damon. Un escalofrio recorrió mi cuerpo al sentir su calido aliento cerca de mi oído.
-Me has asustado- le recriminé dándome la vuelta para encontrarme con su intensa mirada.
Escuché su tono reductor y tentador.
Aburrida y tediosa clase de historia o una tarde con Damon que prometía ser sumamente interesante e inquietante.
-Dame alguna razón por la que debería ir contigo Damon. Se supone que debería entrar a clase..-
La historia era la materia que más detestaba y lo cierto era que ya estaba casi totalmente convencida pero, como de costumbre, no le mostraria lo fácil que le había resultado.
-Supongo que no tengo demasiadas alternativas ¿verdad?- Y luego de decir aquello y asegurarme que nadie nos estaba viendo, salimos del edificio. Allí su ostentoso auto negro nos esperaba.
-Espera- Le dije antes de llegar hasta el. Me detuve de pronto y entonces inesperadamente, incluso para mi, me quité lentamente el collar que contenía verbena dentro.
El me miró confuso -Dije que confiaba en tí y todavía no he cambiado de parecer- Sonreí mientras guardaba el collar en un lugar que estuviera a mano y entonces si me acerqué al auto, el más llamativo de los que estaban en el aparcamiento.

Primero se movió inquieta, hasta que descubrió que era yo y también se removió, pero de una forma mucho más tentadora. Se dio la vuelta para enfrentarme y alcé el ceño con una media sonrisa.
- Se tiene todo tipo de sensaciones al verme, eh? - dije burlándome de aquel escalofrío que no se me pasó por alto. La vi sopesando lo que le había dicho con una expresión que pretendía no dejarme saber lo que resolvía.

- ¿Una buena razón? - fingí dudarlo mientras apoyaba una mano contra la pared próxima a mí para recargar mi peso en ella - Tengo una muy buena en realidad.. y es que no te lo estoy preguntando, te lo estoy informando - si era un secuestro no pensaba pedirle permiso para hacerlo. Un gesto divertido apareció iluminando mi rostro.

- Sí tienes dos bonitas alternativas, salir caminando o que te cargue hasta el auto, ¿cuál escoges, honey? - y su respuesta resultó sumamente clara cuando comenzó a caminar saliendo del edificio y yendo hasta mi auto.
Justo cuando estaba por abrir la puerta para ella se detuvo, y yo también para ver qué se proponía.
Se puso a quitarse el colgante, un gesto que me sorprendió, y mucho más después de lo que dijo a continuación. Me quedé pensándolo, ella sí que sabía cómo desarmarme en el momento justo. Lo guardó y siguió hasta el auto como si nada.

Cuando reaccioné noté lo serio que estaba, esa clase de expresiones sinceras que no se pueden evitar ante situaciones de ese estilo, que me tocaban.
Fui hasta su lado para abrirle la puerta del copiloto, pero antes de dejarla entrar interpuse mi mano.
Miré su perfil por un instante con atención frunciendo el ceño y deposité un beso sumamente dulce sobre su mejilla, sobre aquella piel suave y perfecta tan propia de Elena, que por cierto duró algún segundo más de lo normal. Me aparté para dejarla subir y poder cerrar la puerta.

No me engaño mientras fingia pensarlo y se recostaba sobre la pared con indiferencia. Por un momento me imagine a mi como cualquier otra humana que desconocia lo que era en verdad Damon, y aceptaba sin dudar la propuesta de una escapada con,indescutiblemente, el chico mas guapo que estaba en el instituto en ese momento.
No pude evitar reir al escucharlo decir que no era solo una propuesta sino que me lo estaba informando.
Sus alternativas no me sorprendieron aunque claro, si me conocia lo suficiente, sabia que no dejaria que me "cargara" en sus brazos hasta el auto, y menos alli.
No mire a Damon al quitarme el collar e imagine que tampoco habria hecho la gran diferencia ¿o si?
Se acerco hasta la puerta del copiloto para abrirme la puerta. Eso si habia que reconocerselo: Damon nunca habia dejado de ser un caballero y era de las cosas que mas me atraian de él. Justo cuando me proponia entrar al auto se interpuso el brazo de Damon. Lo mire con el ceño fruncido esperando cualquier otra cosa menos lo que sucedio a continuacion. Damon se acerco lentamente y deposito un tierno beso, con sus suaves labios, en mi mejilla. Antes de decir nada ya habia dado la vuelta y me esperada en el interior.
Me sente tambien aun sorprendida por el gesto -¿Entonces es un secuestro, que tienes planeado?- pregunte curiosa. Asi veia el hecho de aparecerse sin aviso e "informarme" que hoy no iria a clases.

Di la vuelta alrededor del auto y me acomodé en mi asiento, mientras encendía el motor. Éste rugió, digno de mi propiedad, para luego pasar a ni oírse.
- Empiezo a cuestionarme el llamarlo secuestro - miré a Elena de arriba a abajo antes de arrancar, notando que su vestimenta del día era especialmente sexy, tal como si se hubiera preparado para salir conmigo - no es secuestro si estás de acuerdo y.. no te veo poner mucha resistencia ni que te importe demasiado dejar a Stefan estudiando la historia de Bugsbunny solito por hoy - sonreí satisfecho y aceleré, entrando nuevamente en la carretera y disponiéndome a acelerar bastante.

- Planeo emborracharte, seducirte y hacerte cometer locuras en un auto de lujo - solté con suma seriedad para dejar que al menos dudara que en verdad fuera a hacerlo. Bueno, sinceramente aquello nunca estaba del todo fuera de mis planes.
- A que no suena nada mal.. - alcé el ceño con picardía y tomé una curva con velocidad para hacer que ella se ladeara hacia mi. Aquella carretera era ideal para hacer maniobras, estaba vacía casi siempre.

Me percate de su mirada sobre mi y entonces pensé en que la ropa que usaba y que rápidamente había escogido no era la más apropiada para una escapada con un vampiro, pero de todas formas ya era tarde para eso.
-Debo admitir que la idea resultó demasiado..tentadora- comenté sin darle importancia y con la intención de que desviara su atención de mi vestimenta. -Stefan no estaba allí-
Miré por la ventanilla hacia afuera. El mismo me había dicho la noche anterior en mi habitación, que hoy no podría asistir al Instituto, pero rápidamente la conversación había quedado desvanecida por ciertas "distracciones" de las cuales no pensaba dar detalles a Damon. Y por eso la llegada tarde de hoy.
Gire para mirar su rostro tan serio como habían sonado sus palabras ¿era en serio? Por un momento pensé en que había sido un gran error todo aquello pero entonces él me dedicó una de sus acostumbradas sonrisas.
-Comportate- dije con una sonrisa para después clavar mi mirada en sus brillantes ojos -Lo digo en serio Damon- ¿lo decía en serio..? ¿realmente no quería emborracharme y olvidarme de todo al menos unos minutos? Me recriminé a mi misma por aquellos pensamientos. Debía tener mi mente despejada, no tenía el collar de verbena asique debía de ser cuidadosa para no dejarme llevar por las tentaciones.
Justo entonces, y para sacarme de mis confusos pensamientos, Damon tono una curva demasiado rápido y al no tener el cinturón puesto me incliné hacia su lado.
Era obvio que lo había hecho con intención -¿Es que los vampiros no conocen el límite de velocidad?- comenté mientras me incorporaba.

"Stefan no estaba allí", eso me dio una buena idea.
- Y.. ¿te dijo a dónde iba? - pregunté fingiendo desinterés, como una pregunta que se hace al pasar - quizás le dejamos el camino libre para ir a revolcarse con Katherine - comenté para picarla, aunque ese no era el cometido de mi pregunta.

Realmente se tomó en serio eso de que me aprovecharía de su exceso de alcohol, vi cuan tensa se puso, pero al verme sonreír se alivió. Wow, de verdad me tenía miedo.. que sexy.
- ¿Comportarme? Nunca lo hice, ¿por qué empezar ahora? - lamentaba no poder soltar esa típica excusa de humanos de "la vida es corta, hay que disfrutarla", pero tenía otra muy buena, "si vamos a vivir una eternidad, que sea una divertida".
- Además.. ¿por qué te pones tantas prohibiciones? No estás atada, eres una ciudadana libre. Be free, disfruta de tu secuestro - le dirigí una mirada frunciendo el ceño. A pesar de sus sonrisas encantadoras estaba muy tensa. Eso era algo que pronto desaparecería.

Solté una risa irónica cuando mencionó los límites de velocidad.
- Los vampiros no sé, yo sí y me aburren demasiado - el resto del camino era muy tranquilo, y no había tantas curvas con las cuales jugar. Aproveché para acelerar en unas cuantas ocasiones dejando muy atrás a los pocos conductores que encontraba.
Era un buen trayecto, por los límites de Mystic Falls, bastante lejos. Llegamos a una zona mucho más poblada ya que limitaba con una ciudad grande y turística. Los automóviles de por allí eran mucho mejores que los que se solía ver por el centro de nuestro poblado, pero era practicamente imposible encontrar uno mejor que el que usábamos, dudaba que exitiera. Un pequeño gusto que jamás me negaba, el destacar de la multitud.

- Llegamos, honey.. lo mejor del caribe, las Vegas y de mi, todo en un sólo lugar - esbocé una expresión de complacencia mientras aparcaba en aquella buena imitación de estacionamiento de playa.

______________________________________________________________________________

______________________________________________________________________________

Lo mire con desconfianza ante su pregunta desinteresada -Es cosa de el ¿no te parece?- le desvie pero entonces calle ante su posibilidad. Desvie la mirada para que no viera nada en ella, unas cuantas veces había tenido la sensación de que Damon podía ver más allá de lo que a veces quería dejarle mostrar.
-Prometi que confiaba en ti- "no lo heches a perder" agregue en mi mente. -¿no te parece una razón suficiente?
Escuché sobre las prohibiciones que según él, me ponía yo misma -Ah claro se supone que soy libre pero un vampiro llega y me informa que me secuestrará..cuánta libertad- repuse divertida con un poco de rascasmo y luego sonreí -Se que soy libre, por algo estoy aquí y en parte por mi voluntad- por alguna extraña razón no me había negado demasiado y todavía ni yo podía explicarlo aunque sabía que no tenía demasiadas alternativas con Damon.
-No me sorprende, no te imagino a ti respetando cualquier regla y menos la del tráfico.
Observé que seguía conduciendo a la misma velocidad aunque, por suerte, las curvas habían disminuido.
Mire como hipnotizada el lugar ignorando la descripción que hacia, realmente parecía un lugar bastante..al estilo de Damon.

Lo mire con desconfianza ante su pregunta desinteresada -Es cosa de el ¿no te parece?- le desvie pero entonces calle ante su posibilidad. Desvie la mirada para que no viera nada en ella, unas cuantas veces había tenido la sensación de que Damon podía ver más allá de lo que a veces quería dejarle mostrar.
-Prometi que confiaba en ti- "no lo heches a perder" agregue en mi mente. -¿no te parece una razón suficiente?
Escuché sobre las prohibiciones que según él, me ponía yo misma -Ah claro se supone que soy libre pero un vampiro llega y me informa que me secuestrará..cuánta libertad- repuse divertida con un poco de rascasmo y luego sonreí -Se que soy libre, por algo estoy aquí y en parte por mi voluntad- por alguna extraña razón no me había negado demasiado y todavía ni yo podía explicarlo aunque sabía que no tenía demasiadas alternativas con Damon.
-No me sorprende, no te imagino a ti respetando cualquier regla y menos la del tráfico.
Observé que seguía conduciendo a la misma velocidad aunque, por suerte, las curvas habían disminuido.
Mire como hipnotizada el lugar ignorando la descripción que hacia, realmente parecía un lugar bastante..al estilo de Damon.
-¿De donde conoces este lugar?- pregunté curiosa ya que no lo conocía aunque imaginé que el vampiro habría conocido unos cuántos más lugares en su muy larga existencia.

Su respuesta y silencio me dijeron justo lo que necesitaba saber, ella no tenía ni idea de dónde estaría Stefan. Eso me alegró, pero no dejé que se notara.
- No tiene que ver con revolcones pero.. te aseguro que tiene que ver con Katherine. Y en parte con nosotros - dije como para convencerla de que yo sí sabía los planes del día de Stefan. Sonreí con tanta malicia como pude, sin mirarla a los ojos ya que eso en ocasiones me hacía flaquear.
- Y, antes de nada, porque conociéndote sé que vas a indagar, deberías saber que este hotel tiene una particularidad.. es una zona muerta. Eso significa que.. ¡a olvidarse de los celulares por aquí! - esto último sí que era cierto, lo cual lo hacía más interesante, sin llamadas que interrumpieran. Mi plan para hacerla enfadar tenía buena pinta, pero por lo bueno que era esperé a estar fuera del auto para llevarlo a cabo, o su reacción me desconcentraría demasiado.

Bajé del auto, fui a abrirle la puerta a Elena y al cerrar le puse la alarma, la cual sonaba como un gemido. Un pequeño detalle por mi parte.
Continuamos con nuestra conversación mientras la dirigía por donde era la entrada principal a aquel paraíso terrenal, con una sonrisita de satisfacción. Definitivamente Elena, este lugar y yo éramos una mezcla explosiva.
La miré a los ojos fijamente por un instante para responderle - no voy a ordenarte cosas, no tiene emoción. Pero no puedo dejar de lado mi encanto, eso es jugar limpio - ¿acaso ella me pedía que no me divirtiera? Eso no estaba dentro de mis posibilidades, y en el fondo pensaba que tampoco era lo que ella esperaba de mí. Estaba convencido de que ella disfrutaba de esto casi tanto como yo. Bueno, no, definitivamente yo lo disfrutaba mucho más.

- Ah ah, me olvidé mencionar la única excepción a tu libertad. Yo - le dirigí un gesto altanero y triunfal al tiempo que me acercaba a su oído - a que soñaste conmigo secuestrándote y aprovechándome de ti - susurré con un tono seductor, dejando que al hablar mis labios rozaran su oreja suavemente.

Con una media sonrisita traviesa me aparté y volví a fijarme en mi camino, dejándola tener su escalofrío con toda libertad. Me fascinaba aquella reacción suya y apostaba a que su cabeza le ordenaba controlarse, mientras que su cuerpo reaccionaba de otra forma, mucho más atractiva para mi gusto.
- Argh, este lugar.. - hice una breve pausa como si estuviera teniendo viejos y agradables recuerdos - aquí traje a la primera humanita sexy, ya es casi costumbre - mentí con suma tranquilidad y descaro, caminando con mis manos en los bolsillos como si le estuviera hablando del clima.

Su sonrisa, como de costumbre, lograba confundirme más ¿Damon sabía donde estaba Stefan? Noté que se rehusaba a mirarme pero le quité importancia al escuchar lo que dijo a continuación. Rápidamente busqué mi celular para comprobarlo por mi misma..señal nula. Tenía razón y por un momento quise comenzar a gritarle unas cuantas cosas, pero como anticipandose, bajo rápidamente del auto. Pensé entonces en Damon y yo aquí por no se cuanto tiempo y sin poder comunicarnos con nadie o sin poder decirle a Stefan.. Frunci el ceño. -Podrías hacermelo dicho antes ¿no te parece?- dije en cuanto abrió la puerta del copiloto y salí por ella. Ahora estábamos solos y totalmente descomunicados..
Me miro fijamente y me dijo que no me obligaría a nada, por alguna desconocida razón , le creí. El nombre de Damon junto a la palabra juego eran dos en una, ya había asumido aquello hace tiempo, pero luego limpio parecía sobrar en todo momento.
Su supuesta excepción a mi libertad no tenía sentido pero tampoco iba a admitirle que, para mi sorpresa y enfado, Damon se aparecía precuentemente en mis sueños..sólo que cuando comenzaba a aprovecharse de mi no lo impedía demasiado. "No será igual en la realidad" pensé "no me dejare llevar por su encanto" pero lo cierto es que sonaba a que esa promesa ya estaba rota antes de hacerla y justo entonces se acercó una vez más.
El escalofrio volvió a recorrerme aunque no sólo al sentir su voz cerca de mi oído, sino por el leve roce de sus labios que me hizo estremecer ¿Lo hacia aproposito o es que ya se me había hecho costumbre estremecerme así ante su cálido aliento? No lo pensé demasiado.
No me sorprendió su relato ¿a donde no había llevado a cualquier humana para aprovecharse de ella para luego terminar quién sabe como? Imaginé a cualquier entusiasmada adolescente deslumbrada por el chico sexy que la elegía a ella de entre un montón.
-Debo ser la excepción. La primera de no estar del todo convencida de
estar aqui contigo- pense sin darme cuenta que lo habia dicho en voz alta.

Sacó su celular y la muy obstinada comprobó que lo que le decía era cierto. Aquello no hacía más que reforzar la broma que le iba a hacer, darle más veracidad y, también, contentarme con tener a Elena para mí solo por cuanto yo quisiera.
"Luces, cámara, acción" pensé - No, no soy tonto. Si lo hubiera dicho quizás te hubieras negado a venir sin decirle a Stefan, lo cual hubiera complicado el plan de Katherine de deshacerse de él para siempre - negué poniendo mi mejor expresión impasible - y si el plan fallaba, Elena, ya no podría tenerte para mi solo. Porque.. ¿de verdad alguna vez creíste eso de que te compartiría? - fruncí el gesto como si lo que acababa de argumentar fuera evidente y lógico. Luego le dirigí una mirada intensa, posesiva y dominante para reforzar aquella frase de quererla para mí solo. Y si ella tenía una buena cantidad de visión de mi como el ser monstruoso que le dejaba ver en ocasiones, no le costaría mucho creer en lo que había dicho. Me dediqué a ver cómo reaccionaba. Si hubiera tenido una cámara en ese mismo momento la hubiera usado.

Lo que había dicho antes había quedado sin peso después de la bomba que le solté. Faltaban los violines de fondo para lo que ella estaría pensando, figurándose a su amado comeconejos muriendo lenta y dolorosamente.

Mi cabeza daba vueltas y estaba literalmente hecha un lío ¿Plan de Katherine? Y Damon ayudándola..tenía bastante sentido. Damon siempre había querido acabar con su hermano por alguna u otra razón..Y Katherine.. ¿realmente había pensado que se quedaría sin hacer nada? No. Pero todos estos días esperaba el ataque hacia mi. Que querría matarme a mi y así poder hacer lo que quisiera tanto con Stefan como con Damon. Recorde la frase "mío o de nadie" sonaba bastante mal pero era cierta y entonces una imagen comenzó a revolotear por mi mente.. La vampira dañando a Stefan..mi Stefan.
Claro, por eso Stefan había estado extraño la noche anterior y mis sospechas del auto eran ciertas: Damon sabía donde estaba su hermano.
-No importa lo que pase nunca seré suya- ¿o es que aún no lo comprendía? -Y no pueden hacerle daño a Stefan..- comenzé a decir en un susurro. No, no lo permitiría ¿pero como? -por favor, Damon, ayúdame- le pedí, ya que si Katherine estaba detrás de todo eso y secundada por Damon, no tenía muchas opciones.
Su sonrisa se intensificó más e intenté mirarlo con el ceño fruncido pero la preocupación ocupaba cada parte de mi ¿como estaría Stefan..? ¿lo matarían por mi culpa..?